Tras un 2020 complicado para el sector del automóvil, afectado por la crisis de la pandemia, se vaticinaba una mejora en 2021 con el levantamiento progresivo de las restricciones en todo el mundo. Al menos eso pensaba la Patronal Catalana de Distribució d’Automoció (Fecavem), que empezaba el año anterior con optimismo.
No obstante, la realidad ha sido muy distinta a lo esperado y el sector del automóvil parece no levantar cabeza. No solo no ha mejorado sino que los datos revelan un empeoramiento en términos de matriculaciones de coches en Catalunya. Si en 202, se matricularon un total de 123.834, en 2021 la cifra se quedó en 110.691, un 10,6% menos. Además, los datos de diciembre no ayudan a hacer pensar en una mejoría… este pasado diciembre se han matriculado un 22,1% menos que en diciembre del año pasado, de 14.852 a 11.573.
¿A qué se debe este agravamiento de la crisis del sector? Según Fecavem, la crisis de la pandemia se ha agravado fuertemente debido a la falta de materiales semiconductores que hay alrededor del mundo y el problema que existe también en el suministro de vehículos.
Como sucedió en 2021, las expectativas del sector para este nuevo año son positivas y se prevé que 2022 será el año en el que finalmente se normalizará la producción y la logística de los vehículos. Ahora bien, para que esto suceda hay muchos factores que deben darse, como una solución para la crisis de los semiconductores o dejar atrás la pandemia definitivamente.