Así es, los coches con más de 5 años de antigüedad sufren un incremento de hasta el 17% de las ventas durante el pasado mes de marzo.

El primer trimestre del año, junto al problema con las cadenas de suministro y la escasez de semiconductores, supuso un incremento del 13,4% en la venta de coches con más de 15 años de antigüedad frente a los coches nuevos, con un total de 167.120 unidades.

El pasado marzo, las operaciones con estos modelos crecieron un 6,6% (64. 583 unidades), lo que supuso casi el 38% del mercado. El mayor crecimiento se produjo en las ventas con modelos de entre 5 y 8 años, que acumularon una subida del 17% hasta marzo, con 43.145 unidades.

Según el director de Comunicación de Faconauto, Raúl Morales, “el mes de marzo ha sido un desastre en todos los sentidos, y esto se ha visto reflejado en el mercado de ocasión que tradicionalmente es el que más aguanta el golpe. A la ya alargada crisis de los microchips se le han sumado este mes la huelga de transportes y la guerra en Ucrania, un cóctel que ha repercutido muy negativamente en las ventas. Fruto de todos estos factores, las transferencias en los vehículos más jóvenes han caído en picado y una vez más son los tramos de más edad los que más se han visto beneficiados, ahondando aún más en la antigüedad de nuestro parque. Estas cifras nos retroceden a los niveles de 2020 y acortan el crecimiento previsto para este año que todavía está lejos de alcanzar a los de los años previos a la crisis sanitaria”.

Se trata de cifras que se espera mantener a lo largo del año, “a este ritmo, las previsiones apuntan a que el ejercicio terminará todavía cerca de un 4% por debajo de las cifras prepandemia”, asegura Tania Puche, directora de Comunicación de Ganvam.