La marca japonesa, está en pleno proceso de revolución interna. Como ha afirmado su CEO Toshihiro Mibe, será difícil la Honda de hoy día dentro de veinte años. Tal es el cambio que la compañía prevé para los próximos años que ya afirman que dejarán de ser una empresa automovilística. Honda ya anunció en su momento su desvinculación con el coche de combustión tradicional para su transición hacía el coche eléctrico y de hidrógeno. Aún así, para la empresa nipona, el futuro de la movilidad no pasa por el coche privado.
Las empresas que cambian por completo su producto
Es complicado pensar que una compañía tan longeva en el sector como Honda deje de fabricar coches, pero si algo hay son precedentes de empresas que cambiaron su producto o servicio por completo.
En ocasiones, la reconversión de un negocio puede suponer su éxito a largo plazo. Como el caso de Nokia, que estuvo cerca de un siglo siendo una empresa de fabricación de papel. O Samsung, que dedicó sus primeras décadas de vida a comercializar pescado, verduras, azúcar, lana y otros productos tan distintos a su negocio actual.
Así pues, adaptarse a las necesidades de los compradores es una obligación para las empresas. Aunque pueda ser complicado para compañías tan grandes y con tanto bagaje a sus espaldas como Honda, adelantarse a las necesidades del mercado puede ser determinante para su éxito en el futuro.
¿Qué hará Honda dentro de veinte años?
Aunque todavía es difícil predecir como será el futuro de Honda, podemos observar pequeñas trazas que la compañía va dejando en sus anuncios y declaraciones.
El pasado mes de setiembre anunció una inversión de 40.000 millones de euros en la fabricación de coches coladores (eVTOL), robots de telepresencia remota al estilo Avatar y cohetes. Esto puede indicar indirectamente la intención de Honda en involucrarse en la industria espacial, pero todavía es difícil aventurarse a decir cual será su futuro.
