El taller mecánico a nivel profesional se ha expandido hasta límites insospechables. Las personas se han acostumbrado a que cuando tengan que llevar su coche a reparar se encuentren talleres de todo tipo.

El mecánico, por su parte, ha considerado que lo vital en el negocio es simplemente el buen servicio que se proporcione, la buena calidad de los recambios, el trato con el cliente, la rapidez en la reparación, etc. Y sí, todo eso es básico. Sin embargo, en algunas ocasiones se descuida la imagen del taller. Es cierto que en la actualidad la situación ha cambiado notoriamente, cada vez más talleres lo tienen en cuenta, otros no, por eso, es trascendente recalcar la importancia que tiene.

Los motivos principales de esta necesidad de cambio

  • Transmisión positiva: La imagen del taller habla de este por sí sola, y dice mucho de los trabajadores que hay en el mismo. Lo que son, lo que hacen y lo que quieren.
  • Comunicación con el cliente: La imagen es una forma más de comunicación con el cliente e influye directamente en sus decisiones.
  • Diferenciación: Es un elemento diferenciador con respecto a la competencia.
  • Crecimiento: Una buena imagen es básica, hoy en día, para un taller que quiere crecer. En un principio se pueden tener clientes porque os conocen a nivel personal y profesional o porque les han hablado bien del trabajo. Pero si la idea es ganar nuevos clientes, es crucial tener una buena imagen, ya que ellos se dejarán llevar en gran medida por lo que ven.
  • Confianza: Si el cliente percibe que se cuida el negocio, asumirá, del mismo modo, que el coche será también cuidado, es decir, que está en buenas manos. Un taller descuidado transmite todo lo contrario.

Para todo ello, es básico: la limpieza (no porque sea un taller ha de estar sucio) y el orden (aceites, recambios, herramientas, maquinaria, todo bien ordenado y clasificado), tanto a nivel de taller, como la sala de espera y la recepción. Si a esto, le añadimos una mano de pintura, un logotipo, un vestuario o uniformidad, podemos conseguir tener un taller con una imagen impecable, que entre por los ojos.

En resumen y para finalizar, además de calidad, rapidez y trato, se debe tener en cuenta la imagen para lograr el crecimiento de este negocio.